Otra vez en Buenos Aires, pero esta vez por una cuestión diferente: vine a despedir a mi hija Paula que se va a Holanda por un año...
Mucho no...?
Poco?
Depende quién responda...
Y vine y ya que estaba me engancho con nuestro Curso anual de la S.A.O.y renuevo cafés y almuerzos y diálogos con colegas, profes, amigos, amigas, querida gente oftalmológica tan querida como toda la otra gente....
Y mi ex jefe Piantoni, y Gabriela Maltese, y el siempre presente Gustavo Multedo, y el nunca bien ponderado Alejandro Berra...
Estoy, creo, en tan buen momento de mi vida , tan feliz que hasta los vendedores me parecen buenos amigos(ja ja y hasta las naranjas del frutero de la esquina me tiran azahares...). Seguramente esto es unilateral. Ellos si no ven una compradora capaz que no me ven con buenos ojos, pero me ven con buenas sonrisas y eso es bueno.
Y entre el Curso Anual (carísimo!!!) y despedida de Pau, está el encuentro con los hijos, que con algunos a veces se demora...nunca es con todos a la vez, falló Vanesa porque dijo: vas a estar con todos tus hijos!!! Error.
Pero sí, con casi todos casi todo el tiempo, más ese tiempo de respiro que les doy y me doy...Tiempo de balance a mitad de año...
No hubo milonga no, faltó...y seguirá faltando...
Lamentablemente y espero mi amiga Mariana Alonso me perdone...no me animé a ir sola a una milonga...
Estoy acá, en mi ciudad, esta es mi gente, pero en fin...lo del tango es tan nuevo que no me da el cuero...me dá para un montón de cosas pero qué sé yo...bah! no sé habría que probar...
Vamos a ver...hoy recién es 28 de madrugada, y me voy el 4...todo puede ser
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